La UNESCO tiene la tarea de favorecer un diálogo entre las civilizaciones, las culturas y los pueblos razonado en el respeto de los valores comunes. Es por medio de este diálogo como el mundo podrá idear proyectos de un desarrollo sostenible que suponga el cumplimiento de los derechos humanos, el respeto mutuo y la reducción de la pobreza
[flagallery gid=10 name=Gallery]
Historia
Todas las estrategias y actividades de la UNESCO se sustentan en las ambiciosas metas y los objetivos concretos de la comunidad internacional, que son plasmadas en objetivos de desarrollo internacionalmente acordados, como los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Por ello, las competencias excepcionales de la UNESCO en los ámbitos de la educación, la ciencia, la cultura y la comunicación e información contribuyen a la consecución de dichas metas.
La CAME (Conferencia de Ministros Aliados de Educación), se reunió en Londres del 1 al 16 de noviembre de 1945, nada más concluir la guerra, una Conferencia de las Naciones Unidas para el establecimiento de una organización educativa y cultural. Ésta reúne a los representantes de casi 40 Estados. Liderados por Francia y el Reino Unido, dos países muy afectados por el conflicto, los representantes deciden crear una organización destinada a instituir una verdadera cultura de paz. Dentro de su espíritu, esta nueva organización debe establecer la «solidaridad intelectual y moral de la humanidad» y, de esta manera, impedir que se desencadene una nueva guerra mundial. De momento se ha conseguido, pero lo que todavía tenemos que resolver, son la cantidad de conflictos locales o regionales que asolan el mundo, a pesar de los esfuerzos de la UNESCO.
Al final de la conferencia, 37 de estos Estados firman la Constitución que marca el nacimiento de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). La Constitución de la UNESCO , entra en vigor a partir de 1946 y es ratificada por 20 Estados: Arabia Saudita, Australia, Brasil, Canadá, Checoslovaquia, China, Dinamarca, Egipto, Estados Unidos de América, Francia, Grecia, India, Líbano, México, Noruega, Nueva Zelandia, República Dominicana, Reino Unido, Sudáfrica y Turquía. La primera reunión de la Conferencia General de la UNESCO se celebró en París del 19 de noviembre al 10 de diciembre de 1946. Participaron en ella representantes de 30 gobiernos con derecho a voto, y entre otras hacen la siguiente proclamación en el preámbulo de su constitución: Que, puesto que las guerras nacen en la mente de los hombres, es en la mente de los hombres donde deben erigirse los baluartes de la paz.
Algunos países se retiraron de la Organización por razones políticas en varios momentos de la historia. Hoy, todos ellos han regresado a la UNESCO. Entre otros Sudáfrica estuvo ausente de 1957 a 1994, los Estados Unidos de América desde 1985 a 2003, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte desde 1986 a 1997 y Singapur de 1986 a 2007.
Para que se pueda establecer una paz duradera, sincera y aceptada por todos, el preámbulo declara que los Estados firmantes de la Constitución están ‘resueltos a asegurar a todos el pleno e igual acceso a la educación, la libre búsqueda de su verdad objetiva y el libre intercambio de las ideas y conocimientos», y se declaran 6 lenguas oficiales: inglés, francés, español, chino, árabe y ruso.
El objetivo de la Organización se ha definido como sigue: «Contribuir a la conservación de la paz y de la seguridad estrechando, mediante la educación, la ciencia y la cultura, la colaboración entre las naciones con el fin de asegurar el respeto universal de la justicia, de la ley, de los derechos humanos y de las libertades fundamentales para todos, sin distinción de raza, de sexo, de idioma o de religión, que la Carta de las Naciones Unidas reconoce a todos los pueblos’.
Desde Patrimonio Actual.com, queremos aportar nuestro granito de arena y para ello publicaremos siempre, aparte de la sección de la UNESCO, artículos, noticias y referencias que vayan en pro de la humanidad, la paz y la cultura. Queremos, y nos hemos propuesto, que la definición de la UNESCO no sean sólo palabras, sino, que entre todos tomemos las medidas oportunas para que los ciudadanos del mundo coexistan libres sabiendo el conjunto de la sociedad que: “sólo la cultura da Libertad”.
La misión de la UNESCO
Consiste en contribuir a la consolidación de la paz, la erradicación de la pobreza, el desarrollo sostenible y el diálogo intercultural mediante la educación, las ciencias, la cultura, la comunicación y la información.
La Organización se centra particularmente en dos grandes prioridades:
- África y la igualdad entre hombres y mujeres, y en una serie de objetivos globales como son:
- Lograr la educación de calidad para todos y el aprendizaje a lo largo de toda la vida:
Asumir un liderazgo internacional en la creación de sociedades del aprendizaje que otorguen oportunidades de educación a toda la población.
Entregar conocimientos especializados y fomentar la creación de alianzas encaminadas a fortalecer el liderazgo y la capacidad nacional para ofrecer una educación de calidad para todos.
El trabajo de la UNESCO es el de un líder intelectual, un mediador honesto y un centro de intercambio de ideas, que busca impulsar el avance de tanto los países como la comunidad internacional en la consecución de estos objetivos.
La UNESCO facilita el desarrollo de alianzas y contribuye a observar el avance de la educación, en particular a través de su publicación anual.
- Movilizar el conocimiento científico y las políticas relativas a la ciencia con miras al desarrollo sostenible.
Abordar los nuevos problemas éticos y sociales:
Desde su implicación en la promoción de las reflexiones internacionales sobre la ética de las ciencias de la vida, en los años 70, la UNESCO sigue fomentando y reforzando los lazos entre los éticos, científicos, legisladores y la sociedad civil para ayudar a los Estados Miembros a establecer políticas sensatas sobre las cuestiones éticas concernientes a la ciencia y la tecnología.
La UNESCO extiende su misión sobre la ética en dos sectores principales, la bioética y la ética de la ciencia y la tecnología, a través de las siguientes funciones:
Laboratorios de ideas.
Acción normativa.
Centro de intercambio de información.
Desarrollo de capacidades.
Catalizador de la cooperación internacional.
- Promover la diversidad cultural, el diálogo intercultural y una cultura de paz.
El intercambio equitativo, así como el diálogo entre las civilizaciones, culturas y pueblos, basados en la mutua comprensión y respeto y en la igual dignidad de las culturas, son la condición indispensables para la construcción de la cohesión social, de la reconciliación entre los pueblos y de la paz entre las naciones.
Esta acción se inscribe en el marco global establecido por la ONU de una Alianza de Civilizaciones. Concretamente, se trata de privilegiar, en el marco de ese diálogo intercultural, que incluye el diálogo interreligioso, y el objetivo principal de este programa, que representa un aspecto esencial del diálogo intercultural, es fomentar el diálogo entre las diferentes religiones y tradiciones espirituales en un mundo en el que los conflictos interreligiosos se intensifican, debido a la ignorancia o el desconocimiento de las tradiciones espirituales y de la cultura propia del otro.
El objetivo inicial de la UNESCO fue congregar a las diferentes religiones y tradiciones espirituales con miras al reconocimiento de la proximidad de sus valores espirituales y de su compromiso con el diálogo interreligioso por medio de Declaraciones formales, aprobadas en encuentros organizados por la UNESCO. La Organización se ha esforzado siempre por reunir tanto a personalidades religiosas eminentes pertenecientes a las religiones que reconocen un solo dios, y a las tradiciones espirituales del mundo como a intelectuales laicos reconocidos por sus reflexiones e investigaciones sobre el hecho religioso (historiadores, especialistas en historia de las religiones, antropólogos, sociólogos, filósofos, etc.), mediante reuniones temáticas e investigaciones interdisciplinarias que tienen por objetivo principal la enseñanza de este diálogo, con el apoyo de la red de Cátedras UNESCO. Con todo esto se consigue un conjunto de prácticas adecuadas que favorecen el pluralismo cultural a los niveles local, regional y nacional, además de iniciativas regionales destinadas a desalentar todas las manifestaciones de extremismo y de fanatismo y a resaltar los valores y principios que conducen al acercamiento.
La UNESCO desempeña una función de observador poniendo de relieve el papel desempeñado por la cultura en las situaciones de emergencia, de conflicto o posconflicto. Dicha Mediación de conflicto se diseña para crear las mejores condiciones posibles para lograr la paz entre las comunidades. Por esta razón la UNESCO ha puesto en marcha un proyecto titulado «hacia una identidad plural en zonas de tensión intercomunitarias». Su acción consiste en parte en talleres de capacitación, responsables de la preparación y promoción de materiales de datos adecuados, concretamente en forma escrita o audiovisual, con el fin de desarrollar el conocimiento y habilidades interculturales de los jóvenes. Estos jóvenes podrían a su vez convertirse en mediadores culturales, vivir y practicar la diversidad cultural y el diálogo cotidiano. En este contexto, los mecanismos de alerta preventiva son una herramienta vital para apaciguar o resolver los conflictos que suelen ser de origen cultural. Un experimento inicial ya ha sido realizado en el sureste de Europa. Un campo especial de acción: la ciudad, un laboratorio intercultural y la esfera de la prevención de conflictos. Su accesibilidad e influencia, y el hecho de que se toman en las poblaciones del norte, sur, este y oeste de la tierra, hace de las grandes ciudades un crisol en el que se producen las mezclas culturales posibles más ricas. Sin embargo, este portal tradicional de intercambio cultural y la innovación también produce la mayor parte de los males de la sociedad moderna: desempleo, pobreza, delincuencia, insuficientes infraestructuras y servicios y problemas ambientales. Las ciudades están cada vez más en la primera línea en la lucha contra la exclusión y en materia de seguridad y prevención de conflictos entre comunidades tienen que idear sistemas de solidaridad a la sombra de la globalización y la protección de los ciudadanos.
La prioridad de la UNESCO en este contexto es fomentar la creación de bases de datos para ayudar a las autoridades locales en la toma de decisiones políticas en cuanto a la lucha contra la exclusión. Un listado de más de 700 se ha elaborado sobre la plataforma de una red de «Ciudades por la paz». El proyecto «Cultura en el barrio» trae una lupa a este intento de diálogo intercultural en el entorno urbano, que se basa en asociaciones entre países africanos y europeos y poniendo énfasis en la integración social y participación de los habitantes, en tanto que demanda la reconciliación gracias en particular al patrimonio cultural, y como espacio de encuentros a través de su programa Rutas de diálogo y que a lo largo de toda la historia humana, los pueblos han intercambiado experiencias culturales, saber hacer, valores y bienes por medio del arte, el comercio y las migraciones – que todos debemos salvaguardar y respetar más –.
Así pues, la historia es el relato de esos viajes. En el siglo actual, el mundo está obligado a cumplir la promesa de justicia, educación, sanidad, alimentos, bienestar y paz para todos.
Son esos encuentros los que permitieron a individuos y comunidades intercambiar ideas y costumbres de un continente a otro. Son estos encuentros los que la UNESCO quiere difundir al mayor número posible de personas.
En palabras de la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova – “La educación otorga sostenibilidad a todos los objetivos de desarrollo y la alfabetización es el fundamento de todo aprendizaje. Proporciona a los individuos las habilidades para entender el mundo y darle forma para participar en los procesos democráticos y tener una voz y también fortalecer su identidad cultural” -.
- Construir sociedades del conocimiento integradoras recurriendo a la información y la comunicación.
En la actualidad el 16% de la población mundial adulta es analfabeta.
Pese a los grandes avances logrados desde 2000, 75 millones de niños, de los cuales el 55% son niñas, siguen sin tener acceso a la enseñanza primaria.
Millones de niños abandonan la escuela sin haber adquirido las destrezas básicas de la comprensión lectora y de escritura. Tenemos que seguir avanzando en todas las áreas para solucionar este gran problema, y conseguir un mundo más justo y mejor para todos.