Por primera vez se expone en Madrid gran parte de la colección de este naturalista y médico holandés con piezas originales procedentes del Real Jardín Botánico y el Museo Nacional de Ciencias Naturales, ambos centros investigadores del CSIC
Entre los tesoros del Archivo del Real Jardín Botánico se encuentra un especial conjunto de ilustraciones de plantas y hongos, procedente de la colección formada por el médico y naturalista Jan le Franq van Berkhey (Leiden,1729-1812). Adquirida en subasta pública en 1785 por orden del rey Carlos III para enriquecer el Real Gabinete de Historia Natural, ahora se exhibe por primera vez en Madrid, en el Pabellón Villanueva del Real Jardín Botánico, y junto a una representación de las series que se conservan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, ambos centros investigadores del CSIC.
Van Berkhey formó su colección a lo largo de cuarenta años, con el propósito de reunir, de forma ordenada y sistemática, ilustraciones de todas las especies del mundo conocido. Para ello adquirió, encargó, e incluso realizó él mismo más de 8.000 dibujos y grabados de los reinos de la Naturaleza, que incluyeron una gran variedad de técnicas y estilos. Realizados en papel de alta calidad y procedentes de distintos países y épocas, en su colección se encuentran representantes de las escuelas holandesa, francesa, belga, china, francesa, británica y austro-germánica.
Comprendidos entre los siglos XVI al XVIII, los dibujos fueron ejecutados en su mayor parte con la técnica de la acuarela, pero también, tinta, aguada y óleo, y en el caso de las estampas, entalladura, calcografía, mezzotinta y estampación natural. También están representados algunos de los ilustradores botánicos de más prestigio de los siglos XVII y XVIII, como Georg Dyonisius Ehret, Pieter Holsteyn, Johann Michael Seligmann y Johann Mätthaus Meriam, entre otros.
La diversidad del mundo natural
Concebida a modo de museo documental, “la colección es un magnífico representante de una época en la que el coleccionismo reflejaba los esfuerzos por sintetizar y comprender cómo se organiza la diversidad del mundo natural. Es también testigo de la alianza que se produjo en ese momento, entre la ciencia y el arte botánicos, y que influirá decisivamente en el avance de estos estudios”, señala el director del Real Jardín Botánico Esteban Manrique, para quien esta muestra, “es un claro ejemplo de la unión de arte y ciencia porque muestra algunas curiosidades de esta última con una innegable belleza artística”. Por último, la colección presenta la convivencia entre antiguos y nuevos sistemas de clasificación que cristalizarán en la adopción generalizada en la segunda mitad del siglo XVIII, del sistema ideado por el botánico sueco Carlos Linneo.
Regnum vegetabile [reino vegetal] es, además del título de la exposición, el epígrafe bajo el que se agruparon las ilustraciones y materiales botánicos en el catálogo de la subasta confeccionado en 1784. Actualmente se conservan 1.646 dibujos y grabados en el Archivo del Real Jardín Botánico, procedentes del Real Gabinete de Historia Natural.
La colección comprende también, más de 6.000 ilustraciones de animales y minerales, así como otros materiales que se custodian en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, y una pequeña serie etnográfica en la Biblioteca Nacional de España. Y, en conjunto, representa un caso insólito por haberse conservado prácticamente íntegra una colección de estas características.
Esta exposición, cuyas comisarias son Esther García Guillén (Real Jardín Botánico) y Mónica Vergés Alonso (Museo Nacional de Ciencias Naturales), reúne una cuidada selección, de la considerada mejor colección neerlandesa de ilustraciones botánicas conservadas en España. Se muestran 94 piezas que incluyen dibujos, estampas, libros, cajas originales y plantas secas, que son testimonio de excepción de la historia de la Botánica y del arte de representar las plantas en la Europa del siglo XVIII. Entre esas piezas, principalmente del Archivo del Jardín Botánico y completadas por algunas del Museo Nacional de Ciencias Naturales, figuran otras del Herbario y la Biblioteca del RJB.
La muestra cuenta con la colaboración de la Embajada en España del Reino de los Países Bajos.
Más sobre la colección Van Berkhey
Resulta curioso conocer cómo la colección Van Berkhey llegó a España y terminó repartida entre el Real Jardín Botánico y el Museo Nacional de Ciencias Naturales, los dos centros del CSIC.
En 1785 el Cónsul General de España en Ámsterdam, Ignacio Jordán de Asso y del Río (1742-1814), escribió al ministro del rey Carlos III de España, conde de Floridablanca, informándole de que la colección de Van Berkhey iba a ser subastada y debido a su importancia recomendaba que el Real Gabinete de Historia Natural de Madrid la comprara.
Floridablanca informó de este hecho a Pedro Franco Dávila, un sabio naturalista español nacido en Ecuador (Guayaquil, 1711 – Madrid, 1786), fundador, antiguo propietario de las colecciones y primer director del Real Gabinete de Historia Natural. Dávila se entusiasmó con la idea de que se pudiera adquirir parte de las colecciones de Van Berkhey, ya que consideraba de gran interés conseguir las 160 carpetas con “dibujos” que se subastaban, y que el Cónsul General Asso terminó comprando. Estas fueron empaquetadas en dieciséis cajones y, embarcadas rumbo a España en el Navío San Gabriel, arribaron en Bilbao el 13 de agosto de 1785.
En la colección, Van Berkhey representa la fisiología de las plantas y animales de África, América, Europa y Asia. Estos dibujos son un ejemplo del saber científico del siglo XVIII, ya que incluyen diferentes escuelas, artistas botánicos reconocidos y variedad de técnicas utilizadas en la ilustración botánica en distintas partes del mundo, aunque la mayoría de ellos no estén firmados. La colección botánica contiene 458 dibujos, acuarelas y aguadas en su mayoría, y 1.188 grabados, incluyendo muestras de “estampación natural”, xilografía y grabado calcográfico.
Johannes Le Francq van Berkhey, hijo del tratante de lana Evert Le Francq y de Maria Berkhey, fue un médico, naturalista, escritor y pintor holandés a quien le apasionaba el dibujo científico, así como los Gabinetes zoológicos y de curiosidades. Él creó uno donde estudiaba, clasificaba, disecaba y dibujaba especímenes; su colección de cerca de 8.000 objetos, también incluía minerales, fósiles, piedras preciosas, libros, manuscritos, cuadros, monedas, medallas y también dibujos e ilustraciones que coleccionó a lo largo de su vida con el objetivo de crear un gran Atlas donde estuvieran representadas todas las especies descritas del mundo.
La muestra se podrá visitar en el Pabellón Villanueva del Real Jardín Botánico de Madrid hasta el 8 de diciembre.