El Día Mundial de la Libertad de Prensa es un día de apoyo para los medios de comunicación que son objetivos para la restricción o abolición de la libertad de prensa
El 3 de mayo sirve de recordatorio a los gobiernos de la necesidad de respetar su compromiso con la libertad de prensa y también es un día de reflexión entre los profesionales de los medios sobre cuestiones de libertad de prensa y ética profesional. También es un día de recuerdo para aquellos periodistas que perdieron la vida en la búsqueda de una historia.
La Directora General de la UNESCO, Audrey Azoulay lanza el siguiente mensaje:
En un momento en que estamos sumidos en la preocupación y la incertidumbre debido a la pandemia del COVID-19, la información libre es esencial para hacer frente a la crisis, entenderla, reflexionar sobre ella y superarla.
En primer lugar, debemos evaluar la importancia vital de la información en estas circunstancias: al informar, se proporcionan a todas las personas los medios para luchar contra la enfermedad adoptando los comportamientos adecuados.
Por ello, nuestra Organización se ha unido al resto de organismos del sistema de las Naciones Unidas en la lucha contra la “infodemia” de rumores y desinformación que está agravando la pandemia y poniendo vidas en peligro. Estamos aunando nuestras fuerzas para promover dos grandes campañas en las redes sociales, “Together for Facts, Science and Solidarity”y “Don’t go viral”.
Para multiplicar la eficacia de esos esfuerzos, nuestra Organización también ha creado un centro de recursosobre la COVID-19 para los medios de comunicación a fin de ayudar a los periodistas a rastrearla información falsa y informar sobre la crisis de manera segura y eficaz, como nos invita a hacer el tema de este Día Mundial de la Libertad de Prensa 2020, “Por un periodismo valiente e imparcial”.
Este tema constituye una oportuna celebración de la labor de aquellas y aquellos que defienden la libertad de información y una prensa independiente que examina y cuestiona los hechos.
Esa libertad de prensa se vapulea con demasiada frecuencia. Ya sea mediante el control político, ideológico o económico, mediante ataques destinados a difamar y desacreditar, o mediante el acoso, a menudo se intenta silenciar a los periodistas, especialmente a las periodistas. Lamentablemente, las circunstancias excepcionales que vivimos hoy en día agravan aún más esta presión que se ejerce sobre los periodistas.
La crisis actual también está aumentando la incertidumbre para la prensa desde el punto de vista económico. Por ejemplo, en el momento en que se acelera la transición digital, los ingresos publicitarios, de los que dependen muchas publicaciones, están disminuyendo o incluso desplomándose. A la larga, los diarios podrían verse obligados a reducir o cesar su actividad, privando a las comunidades de una visión diferente del mundo, de una profundidad de campo necesaria para la diversidad de opiniones.
Ahora bien, en un mundo sumamente interdependiente, como ha puesto de manifiesto esta crisis, toda amenaza o todo ataque contrala diversidad y la libertad de prensa, y contra la seguridad de los periodistas, nos concierne a todos.
Por ello, el sistema de las Naciones Unidas, así como las nuevas alianzas de asociaciones de medios de comunicación, gobiernos y agentes de los ámbitos jurídico, académico y de la sociedad civil, están apoyando a los periodistas de todo el mundo en su lucha por la independencia y la verdad.
Hoy insto a que se redoblen estos esfuerzos. En este momento crucial y para el futuro, necesitamos una prensa libre y los periodistas deben poder contar con todos nosotros, declaró, Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO.