La campaña de la UNESCO cuestiona nuestra percepción sobre lo que debería significar la vuelta a la normalidad en la era post-COVID-19
La UNESCO se fundó tras la Segunda Guerra Mundial con la convicción de que un conflicto sin precedentes podría dar lugar a un mundo mejor y más unido. Dado que las guerras comienzan en la mente de los hombres y las mujeres, es en la mente de los hombres y las mujeres donde debe construirse un mundo mejor, argumentaron los fundadores de la Organización. Esta idea es más pertinente que nunca, ya que los países empiezan a salir de la crisis mundial de la COVID-19, la cual ha puesto en tela de juicio nuestras prioridades, nuestros modos de vida y el funcionamiento de nuestras sociedades.
Personas de todo el mundo mostraron su solidaridad durante la emergencia sanitaria y vieron cómo una mayor cooperación puede ayudar a construir un futuro mejor. Pero a medida que comenzamos a salir de la pandemia, tendemos a olvidar las lecciones que aprendimos y «volvemos a la normalidad», sin tener en cuenta el impacto de lo que consideramos normal para el medio ambiente, la economía, la salud pública y nuestras sociedades.
La UNESCO lanza una campaña mundial para poner en cuestión nuestra percepción de la normalidad. La película de 2,20 minutos no necesita argumentos complejos para hacerlo. Simplemente presenta información objetiva sobre el mundo antes y durante la pandemia. En conjunto, estos hechos invitan a los espectadores a reflexionar sobre lo que es normal, sugiriendo que hemos aceptado lo inaceptable durante demasiado tiempo. Nuestra realidad anterior ya no puede ser aceptada como normal. Ahora es el momento de cambiar.
Como agencia intelectual de las Naciones Unidas, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia, la Cultura y la Comunicación (UNESCO) considera que la necesidad de un cambio duradero debe arraigarse en los corazones y las mentes de las personas de todo el mundo antes de que pueda hacerse realidad.
La campaña forma parte de un esfuerzo más amplio de la UNESCO para reflexionar sobre el mundo del mañana, en particular a través de la iniciativa del Foro de la UNESCO, un laboratorio de ideas que reúne a destacadas pensadoras, el movimiento Resiliart, una serie de mesas redondas sobre el futuro de la cultura y las industrias culturales, la Red de Alfabetización del Futuro, así como el programa Los futuros de la educación y las recomendaciones mundiales sobre la Ciencia Abierta y la ética de la Inteligencia Artificial. Se trata de cuestiones importantes en las que la UNESCO empezó a trabajar mucho antes de que la pandemia las pusiera en el centro de atención.