Sin embargo, la impunidad de estos crímenes sigue siendo generalizada y los periodistas siguen enfrentándose a un enorme número de riesgos
En 2021 fueron asesinados en todo el mundo 55 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, según datos de la UNESCO, lo que supone el menor número de muertes anuales en más de una década.
El Observatorio de Periodistas Asesinados de la UNESCO recogió cincuenta y cinco asesinatos de periodistas en 2021. Dos tercios de ellos se produjeron en países que no sufren conflictos armados, lo que demuestra los continuos riesgos a los que se enfrentan los periodistas en su labor informativa diaria para sacar a la luz las irregularidades. Esto supone una inversión completa de la situación de hace unos años, en 2013, cuando dos tercios de los asesinatos tuvieron lugar en países en conflicto.
Dos regiones especialmente afectadas
La mayoría de las muertes en 2021 se produjeron en sólo dos regiones: Asia-Pacífico, con 23 asesinatos, y América Latina y el Caribe, con 14.
Si bien el número de asesinatos de periodistas es el más bajo desde hace más de una década, la impunidad de estos crímenes sigue estando alarmantemente extendida: los datos de la UNESCO muestran que el 87% de los asesinatos de periodistas perpetrados desde 2006 siguen sin resolverse.
Múltiples formas de violencia
Los periodistas de todo el mundo siguen siendo objeto de altos índices de encarcelamiento, agresiones físicas, intimidación y acoso, incluso cuando cubren protestas. Las mujeres periodistas se enfrentan especialmente a una escandalosa prevalencia del acoso en línea: un informe publicado por la UNESCO en abril mostró que casi tres cuartas partes de las periodistas encuestadas habían sufrido violencia en línea relacionada con su trabajo.
La UNESCO es el organismo de las Naciones Unidas con el mandato global de garantizar la libertad de expresión y la seguridad de los periodistas en todo el mundo y coordina el Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad, que cumple diez años en 2022.
La Organización condena sistemáticamente todos los asesinatos de periodistas y pide a las autoridades que lleven a cabo una investigación completa, ofrece formación a periodistas y actores judiciales, trabaja con los gobiernos para desarrollar políticas y leyes de apoyo, y sensibiliza a la población mundial a través de eventos como el Día Mundial de la Libertad de Prensa, que se celebra anualmente el 3 de mayo.