Durante su participación en el Primer Encuentro Regional de Cocinas Tradicionales del Pacífico que se realizó en Buenaventura (Colombia), una delegación africana decidió llevar como ejemplo a su país la Política a las Cocinas Tradicionales creada por MinCultura
A los africanos y a los habitantes del Pacífico colombiano no solo los une el color de su piel. Su cocina es similar, evoca la histórica y fuerte presencia de la cultura afrodescendiente. Esto se hizo evidente durante el Primer Encuentro Regional de Cocinas Tradicionales del Pacífico que se realizó en Buenaventura, Valle, en el cual pusieron a dialogar a una mujer africana y otra colombiana para que narraran su historia de vida alrededor de la cocina tradicional.
Ana Rosa Heredia Cuesta, cocinera tradicional, nacida en la región del Atrato del Pacífico colombiano, exactamente en la ciudad de Bojayá y Aissatou Cisè de Senegal, Presidenta de una Organización africana que lidera procesos sociales en beneficio de las mujeres, narraron sus impresiones sobre el Encuentro que en esta versión desarrolla un enfoque internacional, destacando las raíces afrodescendientes que unen a Colombia y África.
Visión africana
Aissatou Cisè tiene 40 años de edad y fue invitada especial a este Encuentro por tratarse de una lideresa en procesos sociales a favor de la mujer. Ella destaca que África y Colombia son muy parecidas, no solo en lo que se refiere a la cocina tradicional sino a la cultura en general. Esta invitación le permitió conocer por primera vez a Bogotá, Cali y Buenaventura, pero se queda con el puerto del Valle del Cauca. «Aquí pude corroborar que somos muy iguales. Las mujeres colombianas tienen una gran personalidad y en ese sentido nos identificamos», asegura.
Aissatou, beneficiada por el Proyecto Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola -FIDA-, dirige su propio restaurante en Senegal, donde solo oferta comida típica de su país. Ha saboreado muchos platos colombianos como el pescado de río y mar preparado con diferentes hiervas aromáticas por las cocineras de Guapi, Cauca, y El Consejo Mayor de Cocomacia, del departamento del Chocó, quienes gustosamente han compartido sus historias con Aissatou y sus otras cuatro compañeras quienes conforman la delegación Africana.
En el desayuno probó el calentado paisa, plato que le encantó y lo comparó con uno muy famoso en su país que también se prepara con fríjoles, el ‘Bakal Salow’. Aunque este típico plato paisa la dejó ‘descrestada’ no para de comer el famoso chontaduro valluno con sal y miel.
Mirada Pacífica
Ana Rosa Heredia Cuesta, colombiana de 63 años de edad, es otra mujer que al igual que Aissatou, trabaja por su tierra y sus tradiciones. Ella manifiesta que está impresionada con la presencia de la delegación africana. «Para nadie es un secreto la imponencia de los negros y negras, quienes se destacan a donde llegan, pero que estas mujeres son muy hermosas y siempre están con la frente en alto», aseguró.
Esta cocinera tradicional de Bojayá agradece todos los días a su mamá y a su abuela por haberle enseñado a cocinar con los ingredientes propios de su región. Su abuela materna murió a los 103 años de edad y sobre ella aclara que «duró hasta esa edad por comer muy sano. Solo comía lo que producía la tierra».
Su mamá, Serafina Cuesta Lara, fue muy famosa en el Chocó por ser una de las parteras más reconocidas de la región. Recibió en sus brazos a más de 700 niños entre ellos, a alguno de sus 19 hijos, a quienes les enseñó a cocinar y a amar los productos naturales, en especial las hierbas utilizadas para la cocina.
Ana Rosa define la elaboración de los platos tradicionales como el mejor de los oficios. Actualmente dirige su restaurante en Quibdó, ‘Cocina popular campesina’. «Yo cocino salud y vida. Solo mire cuánta gente muere en estos días por comer tanto químico», señalo la cocinera chocoana.
Estas dos mujeres, además de tener en común sus raíces ancestrales, están de acuerdo en que la Política a las Cocinas Tradicionales que implementa MinCultura en Colombia, es pionera en Latinoamérica y un gran acierto. La africana Aissatou Cisè concluyó que «apenas llegue a mi país me encargaré de liderar un proyecto encaminado a la creación de una política similar que se acople a nuestra propia cultura. Diré orgullosamente que conocí a Colombia, un país que me acogió amablemente y en el cual pude conocer de cerca las gestoras de una política que beneficia y promueve la cocina tradicional y forja una conexión con lo natural y la biodiversidad».
El Primer Encuentro Regional de Cocinas Tradicionales del Pacífico fue organizado por el Ministerio de Cultura y la Gobernación del Valle, a través de su Secretaría de Cultura, con el apoyo del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), la Fundación Activos Culturales Afro -ACUA- y la Escuela Taller de Buenaventura. Este evento, en el cual participaron más de 60 mujeres y hombres, pertenecientes a delegaciones de Guapi, Cauca; Tumaco, Nariño; Quibdó, Chocó. y Buenaventura, Valle del Cauca, hace parte del Plan ‘Todos Somos PAZcífico’, en el marco de la implementación de la Política para el conocimiento, la salvaguarda y el fomento de la alimentación y las cocinas tradicionales del Litoral.