Esto acelerará los procesos de asilo y reducirá la presión sobre los sistemas de asilo, preservando al mismo tiempo las garantías jurídicas para los solicitantes y garantizando el respeto de los derechos fundamentales
La Comisión Europea ha propuesto algunas normas que facilitarán la aplicación por parte de los Estados miembros del concepto de tercer país seguro.
El concepto de tercer país seguro permite a los Estados miembros considerar inadmisible una solicitud de asilo cuando los solicitantes puedan recibir protección efectiva en un tercer país que se considere seguro para ellos.
La propuesta cumple el requisito, en virtud del Pacto sobre Migración y Asilo, de que la Comisión revise la aplicación del concepto de tercer país seguro a más tardar en junio de 2025.
La Comisión ha examinado el concepto de tercer país seguro y su aplicación con arreglo al Reglamento sobre el procedimiento de asilo a la luz de los requisitos establecidos en el Derecho internacional y de la Unión Europea (UE), incluida la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE.
En consecuencia, la Comisión propone los siguientes cambios en las condiciones en las que puede aplicarse el concepto:
- Ya no será obligatoria la conexión entre el solicitante y el tercer país seguro. Los Estados miembros podrán optar por aplicar el concepto de tercer país seguro cuando exista una conexión con arreglo al Derecho nacional.
- El tránsito a través de un tercer país seguro antes de llegar a la UE también puede considerarse ahora vínculo suficiente para aplicar el concepto de tercer país seguro.
- Cuando no haya conexión o tránsito, el concepto puede aplicarse si existe un acuerdo o arreglo con un tercer país seguro. Dicho acuerdo o arreglo garantizará que se examine la solicitud de protección efectiva en el tercer país seguro, de modo que los solicitantes puedan recibir protección si está justificado. Esta opción no se aplicará a los menores no acompañados.
- Además, para reducir los retrasos procesales y evitar abusos, la Comisión propone que los recursos contra las decisiones de inadmisibilidad basadas en el concepto de tercer país seguro ya no tengan un efecto suspensivo automático.
La propuesta también exige a los Estados miembros que informen a la Comisión y a los demás Estados miembros antes de celebrar acuerdos o convenios con terceros países seguros. Esto permitirá a la Comisión controlar que estos acuerdos o arreglos cumplen las condiciones establecidas en el Derecho de la UE.
Con arreglo al Derecho de la UE, los terceros países pueden considerarse seguros cuando cumplen una serie de condiciones, como la protección contra la devolución, la ausencia de un riesgo real de daños graves y de amenazas a la vida y la libertad por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social u opiniones políticas, así como la posibilidad de solicitar y de recibir una protección efectiva.
Corresponde ahora al Parlamento Europeo y al Consejo llegar a un acuerdo sobre esta propuesta.
Para más información
Documento de trabajo de los servicios de la Comisión