La exposición de Caixaforum profundiza en la forma de entender y organizar el mundo de las sociedades que surgieron en Perú antes de la dominación inca mediante 200 piezas de arte mochica procedentes del Museo Larco de Lima (Perú) que incluyen cerámicas, joyas y objetos ceremoniales de metales preciosos, textiles y objetos de uso ritual de madera, piedra, concha y hueso
La directora general adjunta de la Fundación Bancaria ”la Caixa”, Elisa Durán; el director del Museo Larco de Lima (Perú), Andrés Álvarez-Calderón; la comisaria del Museo Larco y comisaria de la exposición, Ulla Holmquist, y la directora en Madrid, Isabel Fuentes han presentado en CaixaForum Madrid “El arte mochica del antiguo Perú. Oro, mitos y rituales”.
Las sociedades mochicas ofrecenun caso verdaderamente singular de desarrollo cultural, económico y político, siglos antes de la expansión de los incas. Fueron las primeras sociedades estatales en el hemisferio sur, inventaron una de las metalurgias y alfarerías más avanzadas del mundo, construyeron auténticas montañas de adobes para llevar a cabo sus prácticas religiosas, y con ellos se produjo un enorme crecimiento de la población y de sus capacidades productivas.
Entre los años 200 y 850 d. C. se desarrollaron en los valles y desiertos de la costa norte del Perú una serie de cacicazgos y reinos de gran complejidad cultural.
Las exposiciones que la Obra Social ”la Caixa” dedica desde hace años a las grandes culturas del pasado tienen como misión mostrar al público las distintas formas en que hombres y mujeres de diversos lugares y épocas se han enfrentado a las grandes cuestiones universales, así como ampliar las perspectivas sobre el mundo a partir de las más recientes investigaciones históricas y arqueológicas.
Detrás de los grandes imperios existe el hormigueo de una diversidad de pueblos y culturas, redes de relación y de intercambio, contactos e influencias entre civilizaciones. Las exposiciones que la Obra Social ”la Caixa” lleva a cabo en el campo de la arqueología y la historia tienen muy presente esta idea.
Junto al Egipto faraónico, presentan la cultura de Nubia y del Egipto copto.
Junto a Roma, el arte etrusco. Junto a la Grecia clásica, los aqueménidas, que fueron sus rivales. De esta forma, la complejidad de las culturas del pasado nos ayuda a comprender la complejidad del mundo actual; la diversidad de los pueblos antiguos, la diversidad de la sociedad de nuestros días.
El arte mochica del antiguo Perú. Oro, mitos y rituales se suma a esta larga lista de exposiciones organizadas por la Obra Social ”la Caixa” en los últimos años para profundizar en la forma de entender y organizar el mundo de las sociedades del antiguo Perú anteriores a la dominación inca.
El arte mochica de la costa norte peruana constituye un arte muy desarrollado. Sus creadores mostraron no tan solo maestría, sino también un gran conocimiento de las narrativas cosmológicas y mitológicas que permitían explicar el mundo. Sus magníficas obras nos explican cómo esta sociedad plasmó sus historias, creencias, mitos y ritos en objetos de cerámica, y cómo sus líderes expresaron su poder y ascendencia divina a través de la vestimenta, mediante los atributos de los animales sagrados.
La exposición llega a CaixaForum Madrid tras su paso por Barcelona. Reúne 200 obras maestras del arte precolombino peruano de la colección del Museo Larco de Lima. Finas vasijas de cerámica, joyas y objetos ceremoniales de metales preciosos, delicados textiles y objetos con plumas, y varios objetos de uso ritual de madera, piedra, concha y hueso no tan solo muestran la destreza de los artistas del antiguo Perú, sino que permiten acercar al público a la forma de entender el mundo de los habitantes originarios de esa parte del planeta.
La exposición finaliza con un ámbito dedicado al héroe mitológico de la sociedad mochica, un personaje denominado por los investigadores Ai Apaec (‘el dios creador’). También incluye un importante conjunto de objetos relacionados con los ritos de la fertilidad, fundamentales en una sociedad cuya principal preocupación era garantizar su continuidad social.
La cultura mochica, muchos siglos antes de la expansión de los incas
En 1532, los conquistadores españoles, liderados por Francisco Pizarro, llegaron a América del Sur y se encontraron con que gran parte de este vasto territorio se hallaba bajo el gobierno de los emperadores incas. La difusión que de esta cultura realizaron cronistas, sacerdotes, visitadores y administradores coloniales hizo que la cultura peruana más recordada hasta el siglo XX fuera la inca. Pero la civilización existía en la región miles de años antes que los incas. De hecho, el Perú se convirtió así en uno de los pocos lugares del mundo donde surgió la civilización aproximadamente hace 5.000 años.
En la costa norte, la abundancia de recursos marinos permitió a sus pobladores contar con una fuente de alimentación permanente. La domesticación del algodón, hace 5.000 años, y la confección temprana de redes incrementó la pesca. Al tener asegurado el alimento para una población creciente, la pesca abundante también otorgó a los pobladores costeños un recurso valioso para establecer un intercambio con sus vecinos de las alturas, algo que resultaba indispensable para acceder a sus fuentes de agua. De esta forma sería posible el desarrollo de obras hidráulicas para irrigar las áridas tierras de la costa. Las comunidades costeñas, bajo el liderazgo de autoridades que iban consolidando su poder político y religioso, dieron forma a los valles que hoy enverdecen la costa peruana y se convirtieron en sociedades agrícolas.
En esta región, a lo largo de 3.000 años se desarrollaron las culturas cupisnique, mochica, lambayeque y chimú. Sin embargo, los pobladores norteños mantuvieron a lo largo de su historia relaciones con otras sociedades del centro (Lima, chancay), del sur (Nazca, chincha) y de las tierras altas (Recuay, huari) del área central andina.