Minimizar las pérdidas materiales y humanas que entrañan las inundaciones o tormentas repentinas. Éste es el objetivo de Inundatio, un proyecto europeo desarrollado dentro del programa Interreg Sudoe, en el que participan entidades de España, Francia y Portugal
La Fundación Santa María la Real coordina a un equipo multidisciplinar integrado por técnicos del Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL), la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), la Agrupación Empresarial Innovadora para la Construcción Eficiente (AEICE), el Centre d’Etudes et d’Expertise sur les Risques, l’Environnement, la Mobilité et l’Aménagement (CEREMA) de Francia y el Laboratório Nacional de Engenharia Civil de Portugal (LNEC).
Su reto es generar un sistema capaz de detectar y prevenir las tormentas e inundaciones repentinas. ¿Cómo? Monitorizando las cabeceras de las cuencas de los ríos, mediante la colocación de sensores, que recogerán información hidrometeorológica, para controlar en tiempo real aspectos como el caudal del río o la previsión de lluvia. La información se volcará en una plataforma web de fácil visualización que ofrecerá, además, simulaciones de posibles escenarios de riesgo.
El proyecto reúne el saber de diferentes disciplinas con los últimos avances tecnológicos y combinará la sensórica en tiempo real con inteligencia artificial (IA), sistemas de información geográfica, modelización del terreno y telecomunicaciones. Su base tecnológica se verá complementada con el desarrollo de diferentes planes y estrategias de prevención y gestión de la emergencia.
Predecir el futuro, partiendo de experiencias pasadas
El sistema diseñado facilitará la gestión de riesgos frente a inundaciones, estableciendo mecanismos de prevención, predicción y protección. Para ello se está aplicando un modelo de razonamiento basado en casos (CBR) o, lo que es lo mismo, predicción de posibles riesgos a partir de experiencias pasadas.
José Ramón Villar, del Departamento de Informática de la Universidad de Oviedo, que trabaja con el Instituto Tecnológico de Castilla y León, lo explica de forma muy gráfica, “el CBR trata de imitar el comportamiento de nuestro cerebro que es capaz de planificar y actuar, basándose en vivencias anteriores. Ante una situación concreta, recordamos otras parecidas, discriminamos aquellas que nos parecen más relevantes, utilizamos lo que se adapta a la situación que estamos viviendo y si el resultado es acertado, aprendemos y podremos aplicarlo en el futuro”
Así se está trabajando en el proyecto INUNDATIO. Los socios expertos en hidrología e hidrodinámica realizarán simulaciones a partir de modelos numéricos que se extraerán de la observación de las cuencas. “Serán las experiencias pasadas de nuestro CBR, puesto que recogerán el estado de la cuenca antes y después de la simulación, atendiendo a diferentes variables y criterios”.
¿Qué beneficios aportará el sistema?
“Imagina que lleva una temporada lloviendo, los caudales de los ríos están bastante cargados y además existe una amenaza de lluvia torrencial, ¿podemos predecir qué ocurrirá?”, José Ramón Villar afirma que sí y dibuja un posible escenario para explicar con mayor claridad cómo funcionará el CBR, “recogerá la información de la cuenca y la estimación de lluvia que le proporcionemos, bien mediante una previsión meteorológica o a través de una curva de evolución de lluvias. Con esos datos, nos proporcionará una imagen muy realista de lo que sucederá en un determinado horizonte temporal – una, dos o seis horas – en diferentes puntos de la cuenca y de este modo podremos saber cuáles corren riesgo de inundación y actuar para poder prevenirlo”
El diseño del CBR ya está concluido. Paralelamente se trabaja en el desarrollo de la plataforma web y el último paso será incorporar la información exacta de los sensores y las simulaciones realizadas en las cuencas para que el prototipo pueda estar listo a finales de año.
Cuatro casos piloto, tres áreas climáticas
Inundatio actúa en cuatro casos piloto, que abarcan las tres áreas climáticas del territorio Sudoe: oceánica, mediterránea y alta montaña y los tres países participantes. Así, en España se interviene en la cuenca del río Venero Claro en Navaluenga; en Portugal en las cabeceras de la ribera de las Vinhas en Cascais y en Francia en las cuencas de los ríos Nive y Gave of Pau.
Por ahora, gracias a la colocación de diferentes tipos de sensores y a los datos arrojados por otros preexistentes, se han tomado muestras en las cuatro cuencas para así poder realizar con mayor precisión las simulaciones que servirán para nutrir de datos y conocimiento al sistema de predicción.
Junto a la plataforma de predicción, se desarrollarán protocolos de actuación, prevención y reconstrucción, así como otros orientados a fomentar la participación, la concienciación y la resiliencia en las zonas en las que se actúa. El proyecto contempla, además, la transferencia de conocimiento y la difusión, a través de la web www.inundatio.eu, la publicación de informes, organización de talleres u otras acciones divulgativas.
Inundatio se desarrollará hasta agosto de 2022 dentro el programa Interreg Sudoe, con un presupuesto de 1.427.000 euros, de los cuales el 75% son aportados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
Inundatio es un proyecto europeo, realizado dentro del programa Interreg Sudoe, cuyo principal objetivo es diseñar un sistema capaz de detectar las tormentas e inundaciones repentinas para prevenirlas y minimizar las pérdidas materiales y humanas. Su desarrollo corre a cargo de un consorcio integrado por entidades de España, Francia y Portugal.