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Cuando los países más contaminantes del planeta como Estados Unidos, China, India o Rusia, envían a la COP25 negociadores con un perfil bajo, la Cumbre está abocada al fracaso como ha ocurrido en la celebrada en Madrid
La COP25 de la Conferencia Climática de las Naciones Unidas de 2019 concluyó en Madrid, España con la adopción del acuerdo “Chile-Madrid Time for Action”, que sienta las bases para que los países presenten contribuciones más ambiciosas determinadas a nivel nacional (NDC) para 2020 en respuesta a la emergencia climática.
Expresa la «necesidad urgente» de estos nuevos compromisos por parte de los países de cerrar la brecha existente con el objetivo del Acuerdo de París de evitar un aumento de la temperatura de más de 1,5 grados centígrados.
El acuerdo de mínimos fue posible después de un intenso día de negociaciones y después de que la Presidencia chilena de la COP nombró a la ministra interina de España para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, como facilitadora de tres puntos clave que se están negociando: mayor ambición, mecanismos de pérdida y daño, y financiamiento, amanecer el 15 de diciembre.
“Chile Madrid Time for Action” afirma que el proceso para activar la ambición, que comienza en solo 15 días, debe ser coherente con la Ciencia y con lo que los jóvenes demandan en las calles.
«El mandato es claro: los países deben presentar NDC más ambiciosos en 2020 que los que tenemos hoy porque es importante abordar la ciencia y las demandas de las personas, así como comprometerse a hacer más y más rápido», dijo el ministro en funciones de España para La Transición Ecológica, Teresa Ribera.
Además de este llamado a la ambición, el acuerdo establece el calendario para que los países lleguen a la cumbre de Glasgow (COP26) con la tarea hecha. Por lo tanto, los países deben presentar mayores compromisos climáticos en los primeros cuatro meses de 2020 para que las Naciones Unidas prepare un Informe de síntesis antes de Glasgow que indique el progreso en el objetivo del Acuerdo de París de mantener la temperatura del planeta muy por debajo de 1.5 ° C.
IMPULSAR LA ACCIÓN DE ACTORES NO GUBERNAMENTALES
La decisión final adoptada por casi 200 países que forman parte de la Convención Climática de la ONU reconoce la importancia de la acción climática por parte de actores no gubernamentales y los invita a aumentar su acción contra el cambio climático y expandir estrategias compatibles con el clima.
Con un marco de gobernanza ya acordado (el Acuerdo de París y su Libro de Reglas), la COP25 ha sido la primera cumbre climática de un nuevo ciclo en el que la implementación es clave. Es decir, en el que todos los actores hacen más y más rápido, como se refleja en el resultado final aprobado.
“El documento adoptado es la base para permitirnos actuar ahora. El momento de la acción es ahora”, subrayó Ribera al cierre de la conferencia. «Las COP aprovecharon ser foros exclusivamente enfocados en establecer reglas. Esta nueva fase que comenzamos en Madrid exige más acción y más actores», agregó.
“El resultado de la COP25 refleja que lo que queríamos con el Acuerdo de París ya está sucediendo: diferentes sectores están tomando medidas. Muchos de ellos han venido a mostrar por qué quieren asociarse con el proceso de descarbonización, ser parte de él y hacerlo más rápido”, dijo la ministra.
La COP25 ha confirmado que la lucha contra el cambio climático es un tema transversal, y diferentes ministros del sector de todo el mundo han demostrado en Madrid que asumen la agenda climática como propia en sus respectivas áreas de acción.
En las últimas dos semanas, ha habido reuniones de alto nivel en los campos de finanzas, ciencia, industria, energía, transporte, bosques y agricultura, entre otros.
MECANISMOS DE MERCADO
Las partes deciden trabajar en el diseño de mecanismos de mercado en la COP26 con el objetivo de evitar la doble contabilidad de carbono y apoyar la ambición del Acuerdo de París al tiempo que garantiza la integridad ambiental del sistema.
MECANISMO DE PÉRDIDAS Y DAÑOS
Los países acordaron guiar al Fondo Verde para el Clima para ampliar su alcance de financiamiento, y que además de abordar la mitigación y la adaptación, puede destinar recursos sobre pérdidas y daños a los países más vulnerables a los efectos de los fenómenos meteorológicos extremos.
Además, la Red de Santiago se estableció para catalizar la asistencia técnica de organizaciones y expertos dirigidos a estos países vulnerables, mejorando así su capacidad para responder a los efectos del cambio climático.
Este fue uno de los problemas más acuciantes para los pequeños Estados insulares que sufren más directamente los graves impactos climáticos.
PLAN DE GÉNERO
En la COP25, los negociadores acordaron un nuevo Plan de Acción de Género que permitirá tomar medidas para abordar las desigualdades causadas por el cambio climático en las mujeres y las niñas y promover su papel como agentes de cambio en el proceso hacia un mundo libre de emisiones.
Este nuevo Plan que entrará en vigencia en 2025, cuando sea revisado nuevamente, tiene como objetivo lograr una mayor participación de las mujeres en las negociaciones internacionales y asegurarles un papel activo en los procesos nacionales de toma de decisiones.
VICTORIA DEL MULTILATERALISMO Y AFIRMACIÓN DE LA CIENCIA
A pesar de los obstáculos, el multilateralismo y la Ciencia impuestos en la COP25, reafirmando que el conocimiento científico debería ser la fuerza principal para guiar las decisiones y los esfuerzos de los países y otros sectores para elevar su ambición.
El Acuerdo reconoce que la acción climática debe actualizarse permanentemente con base en el avance de la Ciencia y el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), que brindan a los países el mejor conocimiento disponible para fortalecer su capacidad de respuesta a la emergencia climática. Las partes reconocen el valor de los dos informes especiales publicados por el IPCC sobre el uso de la tierra y los océanos en 2019.
«La COP25 reafirma el valor del multilateralismo y la cooperación internacional para resolver un desafío global como el cambio climático», dijo la ministra. “Incluso en contextos globales complejos, la COP25 no abandonó la agenda climática en un momento crucial para la implementación del Acuerdo de París. Por el contrario, ha demostrado un multilateralismo activista”, agregó.
LA DIMENSIÓN SOCIAL FUE EL PROTAGONISTA
Por primera vez, la dimensión social de la agenda climática tuvo un papel de liderazgo en la COP25. Las discusiones en Madrid demuestran cómo las personas, sus preocupaciones y su futuro deben estar a la vanguardia de la respuesta a la crisis climática. Y enfrentar este desafío también significa avanzar hacia un modelo de prosperidad basado en la inclusión y la equidad.
El texto refleja el «imperativo» de que la transición a un mundo libre de emisiones debe ser justa y promover la creación de empleo decente y de calidad.
«No puede haber políticas de descarbonización sin justicia climática, sin justicia entre generaciones y sin justicia para las personas de la misma generación: mujeres y niñas, trabajadores y consumidores vulnerables o personas que viven en lugares que sufrirán un gran impacto por un clima cambiante, » ella añadió.
OCÉANOS Y TIERRAS
En respuesta a los Informes Especiales del IPCC de 2019, la Convención sobre el Clima mantendrá un diálogo sobre los océanos y otro sobre las tierras en junio de 2020. Esto subraya el papel de las soluciones basadas en la naturaleza para ayudar a cumplir el objetivo de 1.5 ° C y la necesidad de actuar juntos y de manera integral para evitar la pérdida de biodiversidad y combatir el cambio climático.
SELECCIONE HITOS DE ACCIÓN CLIMÁTICA COP25
Menos de 15 días después de la formación de la nueva Comisión, la Unión Europa logró lanzar el Green New Deal, un ambicioso paquete de medidas para abordar la emergencia climática. A través del Acuerdo, la UE se compromete a la neutralidad climática para 2050 y a transformar el Banco Europeo de Inversiones (BEI) en un «Banco Climático», desbloqueando un billón de euros (1,1 billones de euros) de inversión verde durante la próxima década y dejar de financiar proyectos asociado con los combustibles fósiles para 2021.
Alrededor de veinte bancos españoles, algunos de los cuales tienen un destacado alcance mundial, acordaron alinearse con el Acuerdo de París.
La Coalición de Ministros de Finanzas para la Acción Climática, que representa a 51 países, incluida España, firmó el Plan de Acción de Santiago, que los compromete a introducir el cambio climático en sus políticas económicas y financieras para lograr un aumento bajo o nulo de las emisiones de carbono.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció la creación de una Red de Bancos Centrales y Supervisores: una plataforma internacional para lograr un sistema financiero verde global.
COP25 ha duplicado el número de fondos de inversión que se han comprometido a hacer que sus carteras sean netas de carbono cero lo antes posible, pasando de carteras por un total de 2.4 billones de dólares (2.16 billones de euros) durante la Cumbre del Clima de Nueva York a 4 billones de dólares (3.6 billones euros) a COP25.
El Fondo de Adaptación pudo movilizar un total de 89 millones de dólares (80 millones de euros) durante esta COP de varios países, incluida España.
El número de multinacionales comprometidas con convertirse en carbono neutral en 2050 se ha duplicado, de 90 en la Cumbre del Clima de Nueva York a 177 en la COP25. Estas empresas emplean a más de 5,8 millones de personas.
El número de grandes ciudades comprometidas con la neutralidad climática en 2050 aumentó de 100 en la cumbre de Nueva York a 398 durante la COP25.
Aunque el Acuerdo de París establece el año 2020 como la fecha límite para que los países presenten compromisos más ambiciosos, este año 73 estados se han comprometido a la neutralidad de carbono para 2050, incluida España. Para lograr esto, España se ha propuesto reducir una de cada tres toneladas de CO2 en la próxima década, duplicando el consumo final de energía renovable en 2030.
Más de 80 países ya han anunciado que presentarán NDC (NDC) más ambiciosos en 2020 que los actuales según el Acuerdo de París.
