Fue el 16 de noviembre de 2010 en Naibori (Kenia), cuando el flamenco obtuvo un máximo reconocimiento internacional como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO como manifestación cultural de carácter universal
El flamenco es una expresión artística resultante de la fusión de la música vocal, el arte de la danza y el acompañamiento musical, denominados respectivamente cante, baile y toque.
La cuna del flamenco es la región de Andalucía, situada al sur de España, aunque también tiene raíces en otras regiones como Murcia y Extremadura.
El cante flamenco lo interpretan, en solo y sentados generalmente, un hombre o una mujer. Expresa toda una gama de sentimientos y estados de ánimo –pena, alegría, tragedia, regocijo y temor– mediante palabras sinceras y expresivas, caracterizadas por su concisión y sencillez.
El baile flamenco, danza del apasionamiento y la seducción, expresa también toda una serie de emociones, que van desde la tristeza hasta la alegría. Su técnica es compleja y la interpretación es diferente, según quien lo interprete: si es un hombre lo bailará con gran fuerza, recurriendo sobre todo a los pies; y si es una mujer lo ejecutará con movimientos más sensuales.
El toque de la guitarra flamenca ha trascendido, desde hace mucho tiempo, su primitiva función de acompañamiento del cante. Éste se acompaña también con otros instrumentos como las castañuelas, y también con palmas y taconazos.
El flamenco se interpreta con motivo de la celebración de festividades religiosas, rituales, ceremonias sacramentales y fiestas privadas. Es un signo de identidad de numerosos grupos y comunidades, sobre todo de la comunidad étnica gitana que ha desempeñado un papel esencial en su evolución.
La transmisión del flamenco se efectúa en el seno de dinastías de artistas, familias, peñas de flamenco y agrupaciones sociales, que desempeñan un papel determinante en la preservación y difusión de este arte.
¿Cuáles son los palos del flamenco más comunes?
Alegrías: Su propio nombre lo dice; este es un compás que indica fiesta y alborozo. Su compás es el mismo que el de la soleá, pero va más rápido.
Bulerías: No hay fiesta flamenca que no acabe por bulerías. Es el cante y baile más flexible de los palos del flamenco, y parece ser que proviene de los gitanos de Jerez, en Cádiz. El compás es (otra vez) el mismo que el de la soleá, ¡pero trepidante! Las bulerías transmiten barullo, alboroto… En el caso de que sean bulerías por soleás, el ritmo es más lento.
Fandangos: De origen árabe y portugués, este compás nos recuerda al fado y a la mezcla de culturas. Cada zona ha hecho suyo su propio estilo, y así tenemos los fandangos de Huelva, los fandangos de Málaga (o malagueñas), etc.
Seguiriyas o seguidillas: Es un cante lleno de sentimiento, triste y doloroso, el que más nos recuerda al cante hondo. Su baile suele ser muy solemne, sin ornamentos, y muy emocionante.
Sevillanas: Es posiblemente el baile flamenco más extendido; se baila en toda Andalucía y tiene la singularidad de que se danza en parejas.
Soleás o soleares: Se discute si su nombre viene de soledad, o de solear, es decir, ponerse el sol. También es un cante solemne, con sentimiento, y es uno de los pilares de los palos flamencos.
Tangos: El baile por tangos es posiblemente el más antiguo, aunque después este palo se haya independizado a solo cante. Cuando el tango gitano se hace más lento, se vuelve más insinuante si cabe, y entonces toma el nombre de Tiento.
¿Cómo diferenciar los palos del flamenco?
La mayoría de los palos del flamenco se agrupan en familias, y eso quiere decir que muchos son prácticamente iguales. Casi siempre depende de dónde se ponga el acento
También se pueden diferenciar los palos del flamenco según sus letras y sus estrofas, como hacemos con una poesía.
Los romances tienen estrofas (que en el cante flamenco se llaman coplas) de tres o cuatro versos octosílabos. Las seguidillas son de tres o cuatro versos, pero de cinco y siete sílabas, y siempre riman los versos cortos. Los fandangos, las coplas son de cinco versos, y riman por un lado los pares y por otro los impares.