El Programa sobre el Hombre y la Biosfera de la UNESCO y LVMH colaboran para reconciliar la conservación de la biodiversidad y su uso sostenible mediante la aplicación de un desarrollo sostenible que respete los contextos culturales locales
Uno de los programas que se lleva a cabo, el Programa del Amazonas, se enfoca en los factores directos e indirectos de la deforestación en la región amazónica dentro de 8 reservas de biosfera situadas en Bolivia (Pilón-Lajas, Beni), Ecuador (Yasuní, Sumaco, Podocarpus-El Cóndor), Brasil (Amazonia Central) y Perú (Manu, Oxapampa-Ashaninka-Yanesha).
El programa se basa en enfoques participativos e inclusivos que combinan el conocimiento científico, local e indígena y será implementado por los equipos de la reserva de biosfera, con el apoyo de los Comités Nacionales del MAB, las oficinas de la UNESCO y un comité científico dirigido por Eduardo S. Brondizio, profesor de la Universidad de Indiana (EE.UU.) y copresidente de la Evaluación Mundial sobre la Diversidad Biológica y los Servicios de los Ecosistemas del IPBES.
Eduardo S. Brondizio explica la situación actual en la región amazónica: «Cincuenta años de intervenciones para el desarrollo han dejado un rastro de degradación y desigualdades sociales que hoy convergen con el cambio climático en una devastadora pandemia de la Covid-19, creando uno de los rompecabezas más complejos de nuestro tiempo en cuanto a gobernanza ambiental y desarrollo.
Las reservas de biosfera del Amazonas representan una pieza clave para encontrar soluciones a este rompecabezas.»
Eduardo S. Brondizio presenta los objetivos científicos y la metodología del programa, centrándose en los factores de deforestación comunes a los distintos países de la Amazonia, los retos que supone compaginar las perspectivas científica, local e indígena, los beneficios que el componente científico del proyecto (un diagnóstico cruzado y una base de datos geoespacial) aportará a las comunidades, y la importancia de las iniciativas basadas en el territorio.
El Programa del Amazonas se centra en dos temas principales con la participación de los actores locales:
Reforestación y rehabilitación de tierras degradadas
Prevención y mejora de la gestión de los incendios en las reservas de biosfera para la salvaguarda de los ecosistemas de la selva amazónica
Por ejemplo, una iniciativa en la reserva de biosfera del Beni (Bolivia) se propone construir un invernadero y suministrar semillas de especies madereras autóctonas de alta calidad (caoba) y cultivos (plátano, café, cacao y cítricos) a las familias que viven en 4 comunidades, para crear parcelas bajo sistemas agroforestales en barbechos, zonas que tradicionalmente utiliza a población local para la agricultura. La iniciativa reforzará las capacidades de producción, transformación y comercialización de los productores, a la vez que promoverá una actividad económica sostenible a largo plazo.
Creación de empleos sostenibles y fuentes de ingresos alternativas
Promover y asegurar ingresos económicos a largo plazo para la población local que no conlleven a la deforestación
Por ejemplo, una iniciativa en la reserva de biosfera de Yasuní (Ecuador) busca empoderar a los jóvenes de Limoncocha, una comunidad kichwa de unas 600 personas en la que la contaminación por plástico se ha convertido en un problema recurrente. El proyecto apoyará a una asociación local de recogida y reciclaje de plástico para mejorar sus infraestructuras, potenciando así la economía circular y reduciendo el impacto ambiental en la reserva de biosfera. Al mismo tiempo se generarán ingresos y se reforzarán las capacidades técnicas y de comercialización de los jóvenes kichwas.
El compromiso de la UNESCO con la biodiversidad
La biodiversidad es el tejido vivo de nuestro planeta. Es la base del bienestar humano en el presente y en el futuro, y su rápido declive amenaza por igual a la naturaleza y a las personas. Según los informes publicados en 2018 por la Plataforma intergubernamental científico-normativa sobre diversidad biológica y servicios de los ecosistemas (IPBES), los principales factores a nivel mundial que provocan la pérdida de la diversidad biológica son el cambio climático, las especies invasoras, la explotación excesiva de los recursos naturales, la contaminación y la urbanización.
La pérdida de biodiversidad implica la disminución y desaparición de especies y diversidad genética y la degradación de los ecosistemas. Pone en peligro las contribuciones vitales de la naturaleza a la humanidad, poniendo en peligro las economías, los medios de vida, la seguridad alimentaria, la diversidad cultural y la calidad de vida, y constituye una importante amenaza para la paz y la seguridad mundiales. La pérdida de diversidad biológica también afecta de manera desproporcionada a los más vulnerables, lo que agrava la desigualdad.
Para detener o revertir este declive es fundamental transformar las funciones, las acciones y las relaciones de las personas con la biodiversidad. Existen muchas soluciones para detener e invertir la disminución de la biodiversidad. Las diversas redes, programas y socios de la UNESCO han observado simientes positivas e inspiradoras de cambio en todo el mundo. La UNESCO acompaña también a los Estados Miembros y a sus poblaciones en sus esfuerzos por detener la pérdida de la biodiversidad, consistentes en comprender, apreciar, salvaguardar y utilizar la biodiversidad de manera sostenible.
Principales puntos fuertes de la UNESCO
La singular contribución de la UNESCO a la conservación y el uso sostenible y equitativo de la biodiversidad apoya y complementa la labor de otras organizaciones y organismos de las Naciones Unidas que trabajan a nivel internacional y local. Su función se basa en una serie de puntos fuertes fundamentales:
- La UNESCO apoya el estudio y la observación de la biodiversidad en los océanos, las zonas áridas, las montañas, los humedales y los sistemas agrícolas, además de la teledetección en apoyo de los sitios del Patrimonio Mundial, las reservas de la biosfera y los Geoparques mundiales de la UNESCO, y trabaja en el ámbito de la biotecnología y la creación de capacidad conexa.
- El poder de convocatoria y la función de la UNESCO como intermediaria honesta con una perspectiva holística combina los conocimientos especializados en las ciencias naturales y sociales con la cultura, la educación y la comunicación.
- Los instrumentos normativos de la UNESCO salvaguardan las zonas de biodiversidad más excepcionales del planeta y reconocen la relación intrínseca entre las personas, la cultura y la naturaleza, incluidas las convenciones intergubernamentales destinadas a salvaguardar y alimentar el patrimonio cultural material e inmaterial.
- La UNESCO tiene un mandato multidisciplinario que abarca la educación y la sensibilización del público sobre la biodiversidad y el desarrollo sostenible. Hace hincapié en los vínculos entre la diversidad cultural y la diversidad biológica, así como en los aspectos sociales y las cuestiones éticas.
- La UNESCO tiene una importante trayectoria en el avance de la ciencia de la biodiversidad mediante una labor pionera en las ciencias ecológicas de los ecosistemas, las reservas de la biosfera, los proyectos relacionados con la biodiversidad, la creación de capacidad, las evaluaciones científicas y las notas de política para ayudar a los encargados de la adopción de decisiones.
- La UNESCO moviliza los conocimientos, la experiencia y las prácticas de las comunidades locales y los pueblos indígenas para apoyar su inclusión en la adopción de decisiones sobre el medio ambiente, en particular en lo que respecta a la diversidad biológica y el cambio climático mediante su Proyecto de Sistemas de Conocimiento Locales e Indígenas (LINKS). LINKS tiene por objeto entablar un diálogo entre los poseedores de conocimientos indígenas, los científicos naturales y sociales, los administradores de recursos y los encargados de la adopción de decisiones, a fin de asegurar una función activa y equitativa de las comunidades locales en la gestión de los recursos.
- La UNESCO apoya los enfoques transformadores y que tienen en cuenta las cuestiones de género en relación con la conservación de la diversidad biológica y el desarrollo sostenible. También promueve los conocimientos que poseen las mujeres en materia de conservación de la diversidad biológica.
- La UNESCO elabora instrumentos de información y comunicación y trabaja con los medios de comunicación para apoyar la educación sobre la biodiversidad.
La diversidad biológica en el Programa de Desarrollo Sostenible para 2030
Detener la pérdida de biodiversidad es un Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS nº 15), que está fuertemente vinculado con todos los demás Objetivos. Mantener ecosistemas resilientes y salvaguardar la biodiversidad de nuestro planeta es fundamental para la erradicación de la pobreza y para la salud y el bienestar humanos.
La biodiversidad es esencial no sólo para el funcionamiento adecuado de los sistemas de la Tierra, sino que también es clave para la prestación de ciertos servicios de los ecosistemas cruciales para la dignidad y el bienestar humanos.
Estos servicios de los ecosistemas dependientes de la biodiversidad incluyen el suministro de agua potable, alimentos y fibras, la fertilidad del suelo, el mantenimiento del banco de datos genéticos de la biodiversidad, la regulación del clima y los valores recreativos y estéticos, entre otros. Por lo tanto, la biodiversidad y la diversidad cultural están estrechamente vinculadas.
Un mundo diverso nos da la flexibilidad de adaptarnos al cambio, incluido el cambio climático. La diversidad biológica, por lo tanto, es la base de la mayoría de los ODS y su pérdida constituye una amenaza tanto para la seguridad como para la paz.
El cambio climático es uno de los principales causantes de la erosión de la biodiversidad. Los cambios en la temperatura de la atmósfera y las precipitaciones, la acidificación de los océanos, la elevación del nivel del mar y la naturaleza de algunos fenómenos extremos repercuten negativamente en la biodiversidad y los servicios de los ecosistemas. Además, el cambio climático amplifica los efectos de otros factores, como la degradación del hábitat, la contaminación, las especies invasoras, la sobreexplotación, el desplazamiento de poblaciones y la migración. La pérdida de la biodiversidad también acelera los procesos de cambio climático, ya que la capacidad de los ecosistemas degradados para asimilar y almacenar CO2 tiende a disminuir, reduciendo las opciones de adaptación disponibles. Por lo tanto, la humanidad tiene la responsabilidad mundial de abordar estos dos desafíos y las interacciones entre ellos.
- La erosión de la biodiversidad es una realidad y debe abordarse con urgencia.
- El cambio climático es un factor impulsor clave y actúa de forma sinérgica con la degradación de la tierra y el crecimiento demográfico para acelerar la pérdida de la biodiversidad.
- La conservación de la diversidad biológica contribuirá a alcanzar los objetivos fijados en el Acuerdo de París de 2015.
- Detener la pérdida de la diversidad biológica es esencial para mitigar el cambio climático y lograr un desarrollo sostenible transformador.
- La migración por motivos ambientales actual y futura depende en gran medida de la aplicación de estrategias de adaptación en las regiones vulnerables, junto con los esfuerzos para mitigar la degradación ambiental y el cambio climático.
De conformidad con su Estrategia de Acción sobre el Cambio Climático (2018-2022), la UNESCO presta servicios de datos e información climática sobre la seguridad hídrica, las ciencias de la Tierra, la biodiversidad y el océano por conducto del Programa Hidrológico Internacional (PHI), el Programa Internacional de Geociencias y Parques Geológicos (PIGP), el Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB), la Comisión Oceanográfica Intergubernamental (COI), el Programa «Gestión de las Transformaciones Sociales» (MOST), el Programa de Sistemas de Conocimiento Locales e Indígenas (LINKS) y la Convención sobre el Patrimonio Mundial.
Los resultados combinados de estos programas garantizan el fortalecimiento de la base de conocimientos interdisciplinarios sobre el cambio climático. La UNESCO también reconoce y promueve la importancia de los conocimientos y la diversidad culturales como impulsores cruciales de la transformación y la capacidad de recuperación de la sociedad necesarias para responder al cambio climático.
Biodiversidad y cambio climático
El cambio climático es uno de los principales causantes de la erosión de la biodiversidad. Los cambios en la temperatura de la atmósfera y las precipitaciones, la acidificación de los océanos, la elevación del nivel del mar y la naturaleza de algunos fenómenos extremos repercuten negativamente en la biodiversidad y los servicios de los ecosistemas. Además, el cambio climático amplifica los efectos de otros factores, como la degradación del hábitat, la contaminación, las especies invasoras, la sobreexplotación, el desplazamiento de poblaciones y la migración. La pérdida de la biodiversidad también acelera los procesos de cambio climático, ya que la capacidad de los ecosistemas degradados para asimilar y almacenar CO2 tiende a disminuir, reduciendo las opciones de adaptación disponibles. Por lo tanto, la humanidad tiene la responsabilidad mundial de abordar estos dos desafíos y las interacciones entre ellos.
- La erosión de la biodiversidad es una realidad y debe abordarse con urgencia.
- El cambio climático es un factor impulsor clave y actúa de forma sinérgica con la degradación de la tierra y el crecimiento demográfico para acelerar la pérdida de la biodiversidad.
- La conservación de la diversidad biológica contribuirá a alcanzar los objetivos fijados en el Acuerdo de París de 2015.
- Detener la pérdida de la diversidad biológica es esencial para mitigar el cambio climático y lograr un desarrollo sostenible transformador.
- La migración por motivos ambientales actual y futura depende en gran medida de la aplicación de estrategias de adaptación en las regiones vulnerables, junto con los esfuerzos para mitigar la degradación ambiental y el cambio climático.
De conformidad con su Estrategia de Acción sobre el Cambio Climático (2018-2022), la UNESCO presta servicios de datos e información climática sobre la seguridad hídrica, las ciencias de la Tierra, la biodiversidad y el océano por conducto del Programa Hidrológico Internacional (PHI), el Programa Internacional de Geociencias y Parques Geológicos (PIGP), el Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB), la Comisión Oceanográfica Intergubernamental (COI), el Programa «Gestión de las Transformaciones Sociales» (MOST), el Programa de Sistemas de Conocimiento Locales e Indígenas (LINKS) y la Convención sobre el Patrimonio Mundial.
Los resultados combinados de estos programas garantizan el fortalecimiento de la base de conocimientos interdisciplinarios sobre el cambio climático. La UNESCO también reconoce y promueve la importancia de los conocimientos y la diversidad culturales como impulsores cruciales de la transformación y la capacidad de recuperación de la sociedad necesarias para responder al cambio climático.