La denominación «Aceite de Madrid» designa el aceite de oliva virgen extra, producido en el sudeste de la Comunidad de Madrid, entre los valles de los ríos Tajo, Jarama, Henares y Tajuña
La Comisión Europea ha aprobado la inclusión del «Aceite de Madrid» en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas (DOP).
La denominación «Aceite de Madrid» designa el aceite de oliva virgen extra, producido en el sudeste de la Comunidad de Madrid, España, entre los valles de los ríos Tajo, Jarama, Henares y Tajuña.
La especificidad de la región vinculada a los factores humanos se distingue por sus prácticas agronómicas y oleícolas, centradas en el respeto de las propiedades originales del fruto.
Las aceitunas se recogen directamente del árbol, nunca en el suelo, y con métodos que respetan la integridad del fruto, con la separación de las aceitunas procedentes del árbol, sanas y frescas.
El transporte a la almazara se realiza siempre por medios que evitan dañar y deteriorar el fruto.
El «aceite de Madrid» presenta un complejo perfil organoléptico con intensidades medias a altas, con aromas de aceituna, almendra, hierba, hoja, manzana, tomate y plátano.
Esta nueva denominación se añadirá a la lista de 1.622 productos agrícolas ya protegidos. La lista de todas las indicaciones geográficas protegidas se encuentra en la base de datos eAmbrosia. En los siguientes enlaces puede obtenerse más información en línea sobre los regímenes de calidad y sobre el portal GIView.
Descripción del producto al que se aplica el nombre
Aceite de oliva virgen extra elaborado a partir del fruto del olivo (Olea europaea L.) exclusivamente por medios mecánicos.
Las aceitunas se recogen directamente del árbol cuando su grado de maduración es como máximo de 4.
Los valores no proporcionados están necesariamente dentro de los límites legales, de acuerdo con la legislación de la UE pertinente.
Características organolépticas:
El análisis organoléptico del ‘Aceite de Madrid’ requiere un perfil sensorial con intensidades moderadas a altas y la presencia de al menos 3 descriptores, aromas olfativos directos o retronasales, para poder optar a la certificación. Los aromas principales son de aceituna, almendra, hierba, hojas, manzana, tomate y plátano.
El perfil organoléptico también incluye notas de aceituna y fruta sanas y frescas y una presencia equilibrada de atributos amargos y picantes con una intensidad mínima de 2 y sin superar la fruta en más de 2 puntos.
Normas específicas relativas al etiquetado del producto al que se refiere el nombre registrado
Las etiquetas de los envases de los aceites de oliva virgen extra certificados deberán llevar de forma destacada sobre cualquier otra información de las etiquetas las palabras ‘Aceite de Madrid’, ‘Denominación de Origen Protegida’ o ‘DOP’.
También deben incluir el logotipo de la Unión Europea (UE) para las DOP y, opcionalmente, pueden incluir la marca de conformidad emitida por el organismo de certificación del producto que pertenece al organismo de control.
Una etiqueta secundaria numerada emitida por la entidad gestora, en base a los informes emitidos por la entidad certificadora, garantizará que los aceites de oliva vírgenes extra amparados por la denominación de origen cumplen los requisitos establecidos en el pliego de condiciones.
Definición concisa del área geográfica
La zona de producción está situada en el sureste de la Comunidad de Madrid, entre los valles de los ríos Tajo, Jarama, Henares y Tajuña.
Lista de municipios:
Alcalá de Henares, Ambite, Anchuelo, Aranjuez, Arganda del Rey, Belmonte de Tajo, Brea de Tajo, Campo Real, Carabaña, Colmenar de Oreja, Corpa, Chinchón, Estremera, Fuentidueña de Tajo, Loeches, Mejorada del Campo, Morata de Tajuña , Nuevo Baztán, Olmeda de las Fuentes, Orusco, Perales de Tajuña, Pezuela de las Torres, Pozuelo del Rey, Santorcaz, Los Santos de la Humosa, Tielmes, Titulcia, Torres de la Alameda, Valdaracete, Valdelaguna, Valdilecha, Valverde de Alcalá , Velilla de San Antonio, Villaconejos, Villalbilla, Villamanrique de Tajo, Villar del Olmo y Villarejo de Salvanés.
Factores humanos
La especificidad de la zona geográfica ligada al factor humano queda patente en las prácticas de olivicultura y extracción de aceite, que se centran en respetar las propiedades originales de las aceitunas y procurar que se reproduzcan íntegramente en los aceites de oliva virgen extra certificados.
Las aceitunas se recolectan directamente de los árboles cuando han alcanzado una madurez máxima de 4, utilizando métodos que las mantienen intactas.
Nunca se recogen del suelo y las aceitunas caídas deben mantenerse separadas de las aceitunas sanas y frescas recogidas de los árboles.
El sistema de transporte utilizado para llevar las aceitunas a la almazara debe garantizar siempre que no se dañen o comprometan en el camino. Para evitar sedimentos rancios o fangosos, las aceitunas no deben amontonarse en ninguna de las etapas de procesamiento.
La temperatura en la etapa de batido no debe superar los 27 o C y el aceite de oliva virgen extra debe almacenarse a temperaturas que oscilen entre los 25 o C y los 13 o C.
Aunque el cultivo del olivo se practicaba en Madrid desde la época romana, fue la llegada de los árabes, que introdujeron nuevas variedades y técnicas y ampliaron la producción, lo que impulsó y consolidó la industria.
Hay constancia de la presencia romana en los valles de los ríos Tajuña, Jarama y Henares, lo que demuestra que hubo viviendas y explotaciones agrícolas y ganaderas en las zonas más fértiles. Los testimonios arqueológicos de los enclaves de Verdugal, Las Dehesas y Casa de Tacona, entre otros asentamientos, demuestran que en la zona se cultivaba aceituna y se elaboraba aceite de oliva virgen ya en el siglo III d.C.
Especificidad del producto
Las variedades de aceituna cultivadas en el área geográfica son Cornicabra, Castellana, Manzanilla Cacereña, Carrasqueña, Gordal, Asperilla y Redondilla, que se han adaptado al suelo, clima y condiciones de cultivo de la zona.
Estas variedades se han perpetuado en el tiempo gracias a la selección natural, adaptándose perfectamente a las condiciones de la comarca. Esto garantiza una identidad multivarietal con propiedades diferenciadas y bien definidas que no se encuentran en ninguna otra zona olivarera del mundo.
Es importante señalar que la zona geográfica de producción es una zona de transición entre zonas donde predomina la producción monovarietal. La zona de producción de aceituna se sitúa entre la zona de producción monovarietal de la variedad Cornicabra de Toledo (al sur) y la zona de producción monovarietal de la variedad Castellana en La Alcarria (al este). También existen monovarietales de manzanilla cacereña, carrasqueña, gordal, asperilla y redondilla.
Este mosaico natural de variedades mayoritarias y minoritarias permite perfiles sensoriales únicos, que es otra seña de identidad de la zona.
La investigación ha revelado valores altos para el contenido total de pigmentos, lo cual es relevante en términos de propiedades antioxidantes en ausencia de luz. Los rangos y niveles informados son distintivos de acuerdo con estudios científicos específicos realizados en el área de producción.
Los estudios realizados para establecer las características de los olivares y del aceite de oliva virgen extra de la zona geográfica continúan reforzando las propiedades antioxidantes del ‘Aceite de Madrid’, que requiere un contenido en polifenoles totales superior a 300 ppm en el momento de la extracción.
El ‘Aceite de Madrid’ tiene un perfil organoléptico complejo con intensidades moderadas a altas y un mínimo de tres descriptores claramente diferenciables. Los aromas principales son de aceituna, almendra, hierba, hojas, manzana, tomate y plátano. El perfil organoléptico también incluye toques de aceitunas y frutas sanas y frescas y una presencia equilibrada de atributos amargos y picantes.